Interprofesionalidad en la formación en salud
Ana Lúcia Abrahão1, Magda de Souza Chagas1, Silvia Eliza Almeida Pereira de Freitas1, Elaine Silva Miranda1, Paula Land Curi1, Ândrea Cardoso de Souza1
1 Universidad Federal Fluminense
La formación profesional avanza en la dirección de incorporar elementos que desplazan la práctica centrada en el paradigma biológico y patológico. Subvenciones para la construcción de procesos pedagógicos que apuestan por el conocimiento y las prácticas, capaces de generar una acción colaborativa entre profesionales. Buscar la oportunidad de aprender y encontrar soluciones ofrecidas por y mediante la colaboración ha sido un movimiento en el campo de la salud en los últimos años.
Recientemente, en la Universidad Federal Fluminense, experimentamos el debate sobre la interprofesionalidad, con una expansión epistemológica y política que apunta a posibilidades concretas de nuevos arreglos para la formación de profesionales de la salud. Ponemos en práctica la construcción de una educación interprofesional, en un grupo de estudiantes y docentes de los cursos de Nutrición, Enfermería, Farmacia, Psicología, Medicina, Educación Física, Trabajo Social y Odontología, ampliados con la participación de profesionales de la red de servicios del municipio de Niterói. Esta experiencia, en el último año, ha sido mejorada por el Programa de Interprofesionalidad de Mascotas, vinculado al Ministerio de Salud, con resultados concretos de reflexión y acción en el servicio diario y la enseñanza, lo que indica una concepción que combina los diferentes núcleos profesionales, contextualizando con el territorio y demanda local.
Operacionalizar la capacitación y el trabajo interprofesional al mismo tiempo es una tarea difícil. Como experiencia educativa, la interprofesionalidad está impregnada de varios factores, entre los cuales podemos destacar el clima político, el apoyo administrativo, la experiencia del profesorado y la historia de la educación de los estudiantes. Desde la perspectiva de los servicios, el proceso de toma de decisiones de la administración central, las interacciones de los profesionales que forman los equipos, incluso los enfoques de educación permanente existentes y los niveles de participación de los actores están involucrados, ya que es en el dominio del trabajo donde se consolidan Los comportamientos y formas de acción profesional, individual y colectiva.
Los supuestos conceptuales de la educación interprofesional son el eje estructurante de la práctica pedagógica de las experiencias que estamos viviendo, y constituyen un espacio en el que se pretende facilitar la comprensión de la complejidad de las relaciones e instituciones humanas, integrando la teoría y la práctica, así como los actores de las escenas de enseñanza, maestro-alumno-ciudadano-usuario-trabajador de la salud, configurando un proceso de trabajo y aprendiendo en un equipo de salud.
Nuestra experiencia ha sido construir espacios para cambiar actitudes y percepciones sobre el aprendizaje y su naturaleza interprofesional. En este sentido, inicialmente se promovieron actividades para permitir la adquisición de conocimiento para el desarrollo de habilidades vinculadas a proyectos interprofesionales. La idea es que los cambios en las actitudes entre los participantes se producen más allá de la percepción del valor de usar este enfoque para la atención en los espacios de servicio. Por lo tanto, expandir las posibilidades de cambio de comportamiento en el entorno de la práctica y, con esto, nuevos arreglos organizativos con las consiguientes mejoras en la salud de la población.
Abrimos la conversación y el debate sobre la interprofesionalidad como eje en la capacitación, construyendo espacios para intercambios y reflexiones, de modo que juntos podamos crear la imagen objetiva del ejercicio de la elaboración de acciones que puedan dar visibilidad y existencia a lo que se recomienda en las Guías Curriculares Nacionales (DCNs). Por lo tanto, haciendo que los estudiantes y los docentes perciban y acojan el campo de acción común entre diferentes profesiones que incorporan las necesidades de salud presentadas por el usuario / paciente. Una red compleja que requiere la inclusión y el enfoque de diferentes perspectivas, que incorporan la discusión amplia de la clínica, entre otros puntos. Si pretendemos que los estudiantes puedan lograrlo, emplear la interprofesionalidad en la acción profesional futura, necesitamos reducir cada vez más la fragmentación y crear composiciones.
Al momento de escribirmos este editorial, el país y el mundo están experimentando la pandemia de Coronavirus, que requiere que reflexionemos sobre lo que somos y queremos como humanidad, dónde ser y estar en la sociedad es importante revisar. Al mismo tiempo, la demanda de acciones intersectoriales, así como las interprofesionales para hacer frente, gana claridad. Ser abiertos y aprender de hoy depende de nosotros. Si la complejidad de lo nuevo requiere perspectivas diferentes, colocar la interprofesionalidad como un desafío diario y curricular es mirar el momento. El nuevo, solicita cambios y requiere actualización.
REFERENCIAS
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